La timidez puede entenderse como una tendencia a evitar situaciones sociales debido al miedo de participar adecuadamente en estas. Este miedo viene dado cuando los niños y niñas son conscientes de que los demás evalúan su conducta y aparece así el temor a una evaluación negativa.
La timidez infantil es algo normal en el desarrollo de los niños y niñas, pero puede llegar a ser problemático.
Las interacciones sociales son fundamentales para el aprendizaje y el desarrollo sano de los más pequeños. Por ello es fundamental proporcionar a los niños y niñas las herramientas para que puedan superar la timidez infantil, evitar la timidez extrema y de esta forma favorecer unas relaciones sociales enriquecedoras.
Timidez Infantil: Características del niño tímido
Cada niño y niña tiene su propia personalidad, carácter y temperamento, algunos serán más extrovertidos y otros más introvertidos. Que un pequeño no sea el más sociable de sus compañeros no quiere decir que sea tímido, o al menos no debe preocuparnos en exceso, debemos prestar atención a las siguientes características para saber si el niño o niña en cuestión es demasiado tímido y esto le puede ocasionar problemas:
Son callados, tranquilos, pasan desapercibidos (en ocasiones hacen grandes esfuerzos para esto último)
Presentan una carencia de conductas interactivas.
Pueden tener conductas de temor, miedo o ansiedad.
Crean una imagen negativa de sí mismos lo que les lleva a una baja autoestima.
Finalmente te dejamos 10 consejos para que ayudes a tu hijo o hija a vencer la timidez infantil.
10 Consejos o soluciones para la timidez infantil
Busca la causa que origina esa timidez. Ten en cuenta que detrás del niño tímido suele haber sufrimiento emocional y sentimiento de ser diferente.
No le expongas a la fuerza a situaciones que le producen inseguridad. La idea es ayudarle a superar la timidez no reforzarla. En lugar de eso empieza por situaciones cotidianas, haz que poco a poco vaya superando sus miedos.
Dale tiempo y acompáñale en el proceso.
Evita ridiculizarle, etiquetarlo o hacerle sentir diferente. Abandona las frases del tipo “no habla, es tímido” “habla más fuerte que no se te escucha” “vete a jugar que no pasa nada”.
Trata el problema con naturalidad. Hacerle ver que lo que a él le sucede le pasa a mucha gente. Háblale de situaciones en las que también sentiste timidez y cuéntale cómo lo superaste. Demuéstrale que sabes cómo se siente.
Procura aumentar las conductas de interacción con los iguales, siempre sin forzarle.
Presta atención a los pensamientos irracionales que tiene, como “soy un inútil” “nunca tendré amigos” y corrígelos sin reprimendas “tú no eres un inútil tú….” “Claro que tendrás amigos…”
Refuerza su autoestima y motívale. Pero ten cuidado el niño tímido trata de pasar desapercibido, a veces un elogio en público le hace sentir incómodo. Procura reforzarle con naturalidad. Haz elogios realistas y dale autonomía.
Ayúdale a expresar sus emociones, pregúntale y escúchale. Toma estas emociones con naturalidad ni con preocupación excesiva, ni con críticas, ni exigencias. Presta atención para que no se avergüence de sus emociones.
En todo caso, si puedes prevenirlo hazlo, proporcionándole desde el principio un ambiente rico en relaciones sociales y siendo un ejemplo en cuanto a tu forma de interactuar.
Finalmente os queremos dejar un juego o dinámica educativa para trabajar la timidez y vencer la vergüenza en los niños y niñas
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